Acciones por el clima
ANTE LA CUMBRE DEL CLIMA DE EGIPTO #COP27 2022
Ante la Cumbre del Clima a realizar entre el 7 y el 18 de noviembre en Sharm el Seij
(Egipto), la Mesa por el Clima de Granada desea manifestar lo siguiente:
- Celebramos que vuelvan a reunirse alrededor de 200 representaciones gubernamentales
para tratar el clima como eje principal. Sin embargo, para el objetivo previsto de no
sobrepasar un incremento de 1,5ºC, es necesaria una mayor ambición que logre la
neutralidad climática antes del año 2050 y libere el fondo económico que los países
vulnerables necesitan, lo que solo es posible a través de acuerdos vinculantes. No es
tiempo ya de buenos propósitos, sino de acciones decididas, lo que debe comenzar
quitando la etiqueta “verde” al gas y la energía nuclear y evitando la vuelta al carbón
para suplir los déficits energéticos: ahorro (limitación en el consumo), eficiencia y
energías renovables se presentan como las únicas alternativas para un futuro posible. - La crisis climática debe ser combatida desde todos los ámbitos sociales, lo que significa
que, si a los gobiernos e instituciones internacionales les corresponde un papel, no es
menor el que le concierne a las instituciones locales y a los ciudadanos, pues todos
tenemos responsabilidades diferenciadas. Desde la ciudad debe mejorarse la eficiencia
energética de los edificios, aproximarse a la ciudad de los 15 minutos para reducir las
necesidades de transporte, establecer amplias zonas de bajas emisiones promoviendo el
transporte público no contaminante, fomentando dietas ecológicas, de proximidad,
temporada y con bajo consumo de carne, optimizando el uso del agua y reduciendo el
consumo compulsivo, favoreciendo la reparación y reutilización. - Como ciudadanos, y ante el próximo año electoral, deben apoyarse los programas de
quienes se comprometan decididamente con medidas de mitigación y adaptación. El
calor, unido a la conminación crónica de nuestra ciudad, puede dañar seriamente la
salud de amplios grupos de población
Es mucho lo que puede lograrse siempre que todos nos impliquemos. Partiendo de una
forma de vida más sencilla, serena y reflexiva, interesándonos por lo público, formando
parte de organizaciones, movilizándose y exigiendo compromisos claros, ambiciosos y
vinculantes. Todavía estamos a tiempo (aunque no quede mucho) para dirigirnos a
escenarios menos preocupantes, siempre con la condición de que todos los actores se
impliquen y sitúen la situación de emergencia climática entre una de sus prioridades.
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