La contaminación ha bajado un 57% en Granada entre el 14 de marzo y el 30 de abril
Un informe de Ecologistas en Acción constata el descenso de la polución en las principales ciudades españolas y teme que el reinicio de la actividad aumente la contaminación por encima de los niveles precedentes.
El independiente de Granada
El informe “Efectos de la crisis de la COVID-19 sobre la calidad del aire urbano en España”, elaborado por Ecologistas en Accion a partir de mediciones oficiales en 26 ciudades del país concluye que la reducción drástica del tráfico se ha traducido en una mejora sin precedentes de la calidad del aire en las ciudades, muy por debajo de los límites legales y las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud, tal y como avanzó El Independiente de Granada y confirmó posteriormente el Ayuntamiento de la capital.
El colectivo ecologista señala que esta reducción de la contaminación se ha producido en el marco de una situación extrema, en absoluto deseable, que ha provocado entre los días 14 y 30 de abril el desplome del dióxido de nitrógeno (NO2) en las principales ciudades del Estado. En Granada los valores obtenidos caen 57%, destacable en una de las tres únicas ciudadades que, junto a Madrid y Barcelona, incumplen cada año el valor límite establecido por la normativa europea.
En la estación de medición de Granada-Norte se ha pasado de una media de concentraciones de NO2 entre 2014 a 2019 de 37 μg/m3, a los 15 μg/m3 medidos desde el 14 de marzo hasta el 30 de abril, suponiendo una reducción del 60%, lo que presenta una foto fija de la calidad del aire de Granada, antes y después de la declaración del estado de alarma y de las medidas de confinamiento.
Entre las principales conclusiones del informe se destacan:
- Desde la declaración del estado de alarma, el 14 de marzo pasado, se ha producido una reducción drástica de los niveles de contaminación por NO2 en las principales ciudades españolas, tanto en el centro como en la periferia. Reducción que se ha cuantificado en un 58% de los niveles de contaminación habituales en estas fechas durante la última década. Se mantienen muy por debajo del valor límite y la guía anual de 20μg/m³ de la OMS, cuando en las estaciones de tráfico superan frecuentemente, los 40 μg/m³.
- Las mayores reducciones se habrían producido en las ciudades de Alicante (72%) y Valencia (69%), y las menores en Oviedo (42%) y Zaragoza (45%). Madrid ha rebajado los niveles de NO2 el 59% y Barcelona el 62%, de promedio. Las redes de medición de las ciudades son muy dispares, por lo que sus datos no pueden compararse con completo rigor.
- Las precipitaciones e inestabilidad atmosférica predominantes durante la primavera, con un mes de abril más lluvioso que la media, también han contribuido de manera importante a mejorar la calidad general del aire.
- El dióxido de nitrógeno (NO2) es el contaminante típico emitido por los tubos de escape de los automóviles (además de por las calderas industriales y domésticas), por lo que su evolución está directamente ligada a las emisiones del tráfico motorizado. Es esta su principal fuente en las ciudades y el principal factor que influye en la calidad del aire urbano.
Ecologistas en Acción destaca que el NO2 provoca cada año en España alrededor de 7.000 muertes prematuras, según el Instituto de Salud Carlos III y la Agencia Europea de Medio Ambiente. Es un gas irritante que agrava las enfermedades respiratorias y merma la resistencia a las infecciones. Diversos estudios están relacionando la mortalidad de la enfermedad Covid–19 con la contaminación atmosférica, como ha recogido también El Independiente de Granada, y la capital es el distrito sanitario más afectado por el coronavirus hasta el 30 de abril, con la tasa de defunción de 42,7 por 100,000 habitantes, la más alta de Andalucía.
Aunque no son objeto del informe, las partículas en suspensión (PM10 y PM2,5) y el ozono troposférico (O3) han disminuido de forma notable en este periodo. La drástica reducción de las emisiones de óxidos de nitrógeno (NOx), principal contaminante precursor del ozono, puede haber contribuido a esta circunstancia, junto al tiempo inestable y lluvioso, estima Ecologistas en Acción.
Cambiar la movilidad
Otra conclusión del informe es que la crisis de la Covid-19 demuestra que la reducción estructural del tráfico motorizado y los cambios en las pautas de movilidad son la mejor herramienta para rebajar la contaminación del aire en las ciudades, aún teniendo en cuenta la excepcionalidad de la situación extrema que estamos viviendo.
Esta dramática situación creada por la Covid-19 viene a corroborar algo en lo que insisten Ecologistas en Acción y la comunidad científica: que la reducción del tráfico motorizado en las ciudades tiene claros efectos en la disminución de la contaminación, algo que supone una importante mejora de la salud pública.
Temor a un rebrote peor de la polución
Paradójicamente, la salida de esta dura crisis podría conllevar el aumento de la contaminación atmosférica por encima de los niveles precedentes, teme la organización ecologista. Para la desescalada, Ecologistas en Acción propone mantener buenas prácticas como la compra de proximidad, el teletrabajo voluntario y la administración electrónica, rebajar el límite de velocidad en vías urbanas a 30 kilómetros por hora, potenciar la movilidad activa peatonal y ciclista y garantizar el transporte público con una ley de financiación.
Ecologistas en acción Granada lleva años pidiendo a las autoridades – ayuntamientos, Diputación y Junta- que se tomen en serio la salud de quienes padecen de la contaminación en el área metropolitana, que habiliten un sistema de mediciones en su conjunto bien ubicado y que se apliquen de forma efectiva los planes de calidad del aire y de movilidad sostenible aprobados durante la última década.
También que se tome en serio la declaración de emergencia climática y se incluya en el orden de día de próximas reuniones comisiones de calidad del aire y medio ambiente en ayuntamientos y Diputación para tomar nota de los efectos del estado de alarma sobre la contaminación.
Por último, Ecologista pide que se aplique sin restricciones la Orden SND/380/2020, sobre las condiciones en las que se puede realizar actividad física no profesional al aire libre durante la situación de crisis sanitaria, priorizando el uso del espacio público de aceras y calzadas para quienes caminan y van en bicicleta.